Un nuevo audio filtrado vuelve a comprometer al intendente de San Lorenzo, Leonardo Raimundo, al revelar una práctica sistemática de clientelismo electoral. En la conversación con punteros políticos, el mandatario expone la entrega de “200 lucas” (200 mil pesos), a cambio de un voto para su espacio en las elecciones del próximo 29 de junio.
El audio pone en evidencia el entramado de manipulación política basado en la necesidad de los sectores más vulnerables. Según se desprende de la conversación, la mecánica implica ofrecer dinero a cambio de apoyo electoral, en una práctica que el oficialismo viene implementando desde hace tiempo para beneficiar a Gustavo Oggero, actual concejal y hombre de confianza de Raimundo, quien encabeza la lista oficialista para las elecciones a concejales.
El esquema se completa con el traslado de votantes el día de los comicios. Desde el comienzo de la campaña, el oficialismo intensificó las entregas domiciliarias de bolsones alimentarios, no solo como forma de asistencia, sino como una forma de ejercer control y presión.
Punteros recaban datos personales y determinan a quién deben “llevar a votar”. Los audios previos difundidos por DATA365 dejan en evidencia el objetivo: condicionar la asistencia social al comportamiento electoral. A quienes son trasladados a votar, se les exige luego una foto del voto marcado con la “X” en el candidato oficialista como comprobante para poder cobrar.
Esta práctica ya tuvo antecedentes comprobados. En 2023, cientos de personas hicieron fila en sede de la Asociación de Taxis para cobrar tras mostrar pruebas del voto. En las últimas elecciones, muchas personas incluso fueron detenidas por la policía por intentar sacar fotos dentro del box de votación. Ahora, con el nuevo audio, el “Plan Platita” suma una evidencia más a un mecanismo sistemático.
Entre las maniobras recientes, también se destacó el llamado “Plan Piedrita”, que consistió en el reparto de piedras y materiales de construcción a domicilio, solicitado a través del canal oficial de Prensa San Lorenzo. A esto se sumó la entrega de un refuerzo en complemento al bolsón mensual, acompañados por un mensaje: “los mandó Oggero”.
Todos estos hechos forman parte de una estrategia calculada, que utiliza recursos del Estado para condicionar voluntades, comprar votos y sostener un esquema de poder tan evidente como repudiado.