Vecinos de San Lorenzo se mostraron preocupados al observar una pala mecánica y un camión trabajando sobre la barranca del paseo ribereño de calle San Luis, en el mismo sector donde ocurrieron dos tragedias en los últimos años. Según relataron, la máquina habría estado retirando tierra de la barranca, un hecho que genera alarma por tratarse de una zona señalizada como peligrosa, con riesgo de derrumbe y antecedentes fatales. También fue visto en el sitio en ese momento, un auto marca Peugeot estacionado en un área donde no está permitida la circulación.
El lugar fue inaugurado por el intendente Leonardo Raimundo en el marco de la campaña electoral de 2023, en una apertura que muchos consideraron apresurada. Hoy, el paseo presenta sectores deteriorados y con carteles que prohíben el acceso, aunque diariamente circula gente y se observan vehículos y operarios trabajando. La presencia de maquinaria removiendo tierra en ese punto reavivó las críticas hacia la Municipalidad por falta de control y prevención.
En el sitio se registraron dos hechos trágicos: la muerte de Gabriel Valentín, cuando un malacate sin señalización provocó su fallecimiento, y la de Sergio Carrizo que cayó al río con su vehículo, en un área que no contaba con guardarrail o barreras de contención, elementos básicos de seguridad. Para los vecinos, que ahora ven nuevas intervenciones sin explicación oficial, la situación resulta tan preocupante como incomprensible.
Hasta el momento, no hubo comunicación pública de la municipalidad explicando los motivos de las tareas ni quiénes son los responsables. En un sector donde ya hubo víctimas fatales y donde la estabilidad del terreno es crítica, el movimiento de suelo sin supervisión técnica refuerza la sensación de improvisación y desidia estatal.
