San Lorenzo volvió a vestirse de memoria este 18 de septiembre, al cumplirse 14 años de la desaparición de Paula Perassi. Vecinos, familiares y organizaciones sociales realizaron una pegatina masiva en el centro de la ciudad, renovando el pedido de justicia en un caso que se transformó en símbolo de lucha contra la violencia de género y la impunidad.
Paula tenía 33 años y estaba embarazada cuando fue vista por última vez en 2011. La causa judicial tuvo idas y vueltas: un fallo absolutorio en 2019, luego revisado, y la condena de Gabriel Strumia -único imputado que permanece detenido- a 17 años de prisión por privación ilegítima de la libertad agravada. A pesar de esto, la sentencia aún no es firme y espera resolución en la Corte Suprema de la Nación.

Durante la actividad, Alberto Perassi y Alicia Ostri, padres de Paula, agradecieron el acompañamiento sostenido en estos años y reafirmaron su compromiso con la búsqueda: “Vamos a seguir luchando por encontrarla. No pedimos venganza, solo que nos devuelvan a Paula, que nos digan dónde están sus restos”. Ambos recordaron el sufrimiento que atraviesan desde 2011 y denunciaron la “maldad” que rodeó la desaparición, marcada por pistas falsas y encubrimientos.

El antropólogo Juan Nobile definió el caso como “el acto de violencia institucional más grave en San Lorenzo en el siglo XXI”. Señaló que las instituciones respondieron con una “estructura patriarcal” que desatendió a la familia: “La intendencia no brindó respaldo ni apoyo, y los Perassi fueron maltratados al denunciar”. Además, remarcó que la desaparición coloca a cualquier familia en un “estado de impasse”, donde la búsqueda se vuelve el único horizonte posible.
Desde Mujeres Evita, Paula Petrillo recordó el miedo latente que dejó el caso: “No éramos las mismas chicas de aquel entonces; la experiencia nos cambió”. Relató cómo la organización se fortaleció en esos años, acompañando a familias y logrando, por ejemplo, la aparición de Sofía Delgado tras 12 días de búsqueda. “A Sofía la encontramos las pibas, y seguimos acompañando también a Paula”, afirmó.
Por su parte, Yazmín Petrillo -referente de Mujeres Evita y recientemente electa concejala- subrayó el carácter permanente del reclamo: “La desaparición es un delito continuo, no cesa. Así nos atravesó durante 14 años y así nos volvimos militantes feministas”. En clave política, cuestionó la falta de una justicia con perspectiva de género y la connivencia policial: “Muy distinto hubiera sido todo si no existiera esa complicidad que aún persiste en esta ciudad”.
El acto cerró y la ciudad amaneció empapelada con el rostro de Paula al otro día, el mensaje fue claro: la causa Perassi no se archiva ni se olvida. San Lorenzo mantiene viva la memoria de Paula en cada cartel y en cada rincón, con un reclamo que sigue siendo bandera de lucha colectiva y de resistencia frente a la impunidad.









