Caso Sofía: Un macabro crimen premeditado para un “sacrificio” humano

La audiencia imputativa que se llevó a cabo en los Tribunales de San Lorenzo a los detenidos por el crimen de la joven sanlorencina Sofía Delgado reveló aristas del aberrante hecho que conmueven por su oscuro modo de ejecución, pero, sobre todo, porque, según la Fiscalía de la causa, se trató de un hecho fríamente premeditado por sus autores. 

En rigor, el fiscal Carlos Ortigoza imputó a Brian Ezequiel Baumann, Alejandro José Bevilacqua y Eduardo Andrés Mordini por los delitos de “homicidio calificado por el concurso premeditado de dos o más personas cometido contra una mujer mediando violencia de género”; y a Natalia Fernanda Palavecino y Miranda Leguizamón, por el delito de “encubrimiento agravado”.  

El Juez de Primera Instancia Eugenio Romanini hizo lugar al pedido de la Fiscalía y dispuso la “prisión preventiva efectiva por el plazo de 180 días” para Baumann, Bevilacqua y Mordini.  

Al mismo tiempo dispuso una «medida no privativa de la libertad» para Leguizamón y Palavecino por el plazo de 180 días, con restricciones (fijar domicilio; firma quincenal en la Oficina de Gestión Judicial; constitución de garante personal y prohibición de todo tipo de contacto con los familiares de la víctima).    

Sala de audiencias de los Tribunales de San Lorenzo

Un crimen planificado 

Tras la audiencia, Ortigoza brindó una conferencia de prensa en las escaleras de los Tribunales de San Lorenzo, donde expresó conformidad con los avances realizados en la investigación hasta el momento, aunque reconoció que aún quedan múltiples elementos por investigar.  

Según explicó, Sofía habría sido asesinada en un taller mecánico y su cuerpo fue posteriormente descartado en el estado en que fue hallado. Esta teoría se basa en una acumulación de evidencias, como mensajes incriminatorios, cámaras de seguridad y testimonios clave. 

Uno de los puntos más relevantes de la investigación radica en los mensajes intercambiados entre los imputados, que sugieren una planificación previa del homicidio.  

Según Ortigoza, los mensajes enviados por Bevilacqua hacia Mordini mencionaban explícitamente a Sofía y contenían referencias perturbadoras sobre «sacrificarla«. Además, los imputados compartieron enlaces de internet con contenidos de carácter violento, que habrían emulado en el crimen, lo que fortalece la hipótesis de premeditación. 

En cuanto al móvil del asesinato, Ortigoza indicó que sigue siendo incierto y que es un aspecto central en la investigación. Sin embargo, señaló que el contexto de violencia, los antecedentes de vulnerabilidad de la víctima y los mensajes intercambiados permiten orientar las pesquisas hacia posibles motivaciones. 

El galpón donde se produjo el crimen de Sofía

La autopsia preliminar reveló que la causa de muerte fue una asfixia mecánica, aunque los detalles específicos aún están en proceso de confirmación. La médica forense estimó que el fallecimiento ocurrió unas horas después de la última comida de Sofía, corroborada por testimonios y registros.  

También se determinó que el cuerpo estuvo expuesto al ambiente antes de ser ocultado, lo que complica la reconstrucción de los hechos. 

La participación de los imputados 

Ortigoza mencionó que la participación de los acusados, tanto en la ejecución como en el encubrimiento del crimen, es un eje crucial de la investigación.  

El fiscal atribuyó que posteriormente a las 23.15 horas del 30 de octubre, en calle Francia al 500 de la ciudad San Lorenzo, Alejandro Bevilacqua, valiéndose de una relación sentimental preexistente con Sofía Delgado, pasó a buscarla a su domicilio a bordo de un automóvil Peugeot 308.   

Posteriormente, la trasladó hacia un galpón ubicado en calle Corrientes al 100 de Puerto General San Martín, el cual es propiedad de Eduardo Mordini; donde ambos le causaron la muerte por asfixia mecánica, posiblemente mientras la víctima se encontraba atada de pies y manos.   

Días después, Brian Baumann, quien se desempeña como empleado del taller, con el fin de ocultar el cuerpo, lo introdujo en una bolsa negra recubriéndola con un aislante térmico y colocó el cuerpo en una bolsa de arpillera.  

Posteriormente, el cuerpo de Sofía fue dejado en una zanja al costado de un camino de tierra en zona rural a 700 metros de la curva del Camino de la Cremería, en la localidad de Ricardone, donde fue hallado alrededor de las 23.15 horas del 15 de noviembre.    

Fiscal Carlos Ortigoza tras la audiencia imputativa

¿Cuál fue el papel de las mujeres imputadas? El fiscal Ortigoza le atribuyó a Miranda Leguizamón haber ayudado a Alejandro Bevilacqua a eludir la acción de la autoridad, alojándolo en su domicilio de General Paz al 1.000 de la ciudad Pergamino donde, además, se le secuestraron elementos utilizados en el homicidio: la llave del automóvil Peugeot 308 y precintos plásticos.  

En tanto, a Palavecino el fiscal le imputó haber colaborado con Alejandro Baumann a ocultar elementos provenientes del homicidio: la insignia del automóvil Peugeot 308 y las prendas de vestir que el imputado utilizó para cometer el delito.  

El imputado que quiso declarar 

Durante la audiencia, uno de los imputados, Brian Baumann, quiso declarar y brindó un extenso testimonio con su versión de los hechos.  Relató una serie de eventos que comenzaron con su llegada al lugar de trabajo y culminaron en el hallazgo de un bulto que le generó sospechas. Afirmó que nunca tuvo contacto con la víctima y describió el momento en que notó un fuerte olor proveniente del taller.   

Según su testimonio, en esas instalaciones encontró una bolsa sospechosa que contenía un bulto cuyo contenido desconocía. En ese momento, consultó a Eduardo Mordini, (para el que trabaja) sobre el hallazgo, quien supuestamente reaccionó mencionando que una mujer estaba desaparecida.  

Brian Baumann relató que Mordini le pidió que cargara la bolsa en una camioneta y que la descartara en algún camino. Aunque inicialmente se negó, finalmente accedió a acompañarlo. En su declaración subrayó que nunca revisó el contenido de la bolsa y que actuó siguiendo las indicaciones de su empleador.  

La investigación continúa 

Durante los 180 días en que los principales imputados estarán en prisión, la Fiscalía continuará con la investigación y la reunión de pruebas que se volcarán en el juicio oral que –todo hace presumir- apuntará al pedido de reclusión perpetua. 

Los próximos días serán clave. «Estamos recién comenzando; llevamos apenas 15 días desde que se inició el procedimiento. Nuestra prioridad es confirmar o descartar cada elemento y lograr justicia para Sofía y su familia», afirmó Ortigoza. 

Abrir Whatsapp
Escribinos
Escribinos!